Por Nicolás Britos (cuando tenía 6 años)
Ilustración de Rodrigo Folgueira, hecha en el 2007. (¡Gracias, Rodrigo, de nuevo!)
Había una vez un perro que hablaba. El sueño de toda su vida fue ir a España. Un día se lo dijo a su amo:
- Señor, el sueño de mi vida es ir a España y por eso quisiera saber si tú me podrías ayudar a cumplir el deseo.
Y el amo le contestó:
- No, yo no puedo a ayudarte. Tendrías que comprar tú el pasaje.
El perro salió de la casa triste. Mientras caminaba por la calle buscando la solución, vio a un niño que estaba jungando en un parque. Se acercó a él y le preguntó:
- ¿Podrías comprarme un pasaje para ir a España?
Pero el niño no pudo decir una palabra del susto que le dio ver hablar a un perro y salió corriendo como loco. El perro quedó muy triste y siguió caminando. En este momento vio a un hombre que trabaja en el circo hablando con los perros y otros animales. El perro salió corriendo hacia ese hombre y le hizo su conocida pregunta:
- ¿Podrías tú comprarme un pasaje para España?
El hombre puso una cara de duda y dijo con admiración:
- ¡Tengo la solución! Y salió corriendo a una tienda de disfraces y compró un disfraz. Como ese día era 31 de Octubre (día de Las Brujas) le explicó al perro el plan. El perro fue al Ministerio de Relaciones Exteriores y gritó:
- TRIKI, TRIKI HALLOWEEN, quiero un pasaje para mí, si no hay para mí, se te tuerce la nariz.
Entró corriendo al Ministerio y empezó a hacer papelotes y papelitos y más papetotes y papetites. El hombre le ayudó con la plata porque era muy rico por su trabajo. Al fin el perro pudo zarpar en un barco.
Al llegar a España bajó del barco y gritó:
- ¡Qué linda es España!
No hay comentarios:
Publicar un comentario